sábado, 3 de julio de 2010

Humor...

¿CUCHARITA, TAZA O CUBETA?

Durante una visita a un instituto psiquiátrico,
le pregunté al director qué criterio se usaba
 para definir si un paciente debería o no ser internado.


'Bueno,' dijo el director, 'hacemos la prueba siguiente:
Llenamos una bañera, luego al paciente le ofrecemos
una cucharita, una taza y una cubeta, y le pedimos que
 vacíe la bañera. En función de cómo vacíe la bañera,
sabemos si hay que internarlo o no y con que tratamiento empezar'
 -Ah, entiendo- dije. - una persona normal usaría la
cubeta porque es más grande que la cucharita y la taza.
- No - dijo el director - una persona normal sacaría el tapón...
¿usted qué prefiere, una habitación con o sin vista al jardín?
Estoy seguro de que pensaste en la cubeta...
¡¡madre mía!!.. 
con qué clase de amigos
he pasado todos estos años.
MI HABITACION DA AL JARDIN ... ¿Y LA TUYA?

jueves, 1 de julio de 2010

Nuevo hoyo "se come" 20 casas en China (y sigue creciendo)
Un hoyo de 150 metros de diámetro sigue creciendo en la ciudad china de Dachegnqiao, donde ya sepultó a 20 casas. El fenómeno se repite luego del descubrimiento de casos similares en 8 ciudades chinas y en Guatemala.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) - Con más de 150 metros de diámetro y 50 de profundidad, nadie acierta a determinar cuáles son las causas de su aparición y voracidad.
Un gigantesco cráter formado cerca de la escuela primaria Qingquan, en la ciudad de Dachegnqiao, provincia de Hunan, en China, mantiene en alerta a las autoridades locales porque ya se tragó cerca de 20 casas y sigue creciendo.

El gigantesco agujero, que mide 150 metros de diámetro y 50 de profundidad, comenzó a formarse en enero de este año. Según medios locales, las causas de su aparición son desconocidas hasta ahora y afortunadamente nadie ha muerto aún en el lugar.

El fenómeno llama la atención por su similitud con otro hoyo gigante aparecido en mayo pasado en Guatemala y que inicialmente se había atribuido a escurrimientos de agua tras la tormenta Agatha.
Una explicación preliminar de que las autoridades dan a la formación del cráter, es que puede ser el resultado de una carga excesiva de agua en el suelo, causada por las lluvias torrenciales.
Sin embargo, las explicaciones de un evento similar en otros puntos de China y en Guatemala no llegan a conformar al público, que sigue buscando razones convincentes de dichos eventos.
¿Cómo está el hoyo de Guatemala?
Compacto está el terreno alrededor del gran agujero donde hace unos días desapareció una edificación de tres plantas en esta capital, indican resultados de estudios divulgados hoy.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) asegura esa solidez, excepto por una pequeña falla sin relación con aquel acontecimiento, ocurrido el pasado 29 de mayo.
El secretario ejecutivo de la CONRED, Alejandro Maldonado, aclaró ante diputados que esa no fue la causa del hundimiento, en tanto se afirma fue el colapso de los colectores de agua en el subsuelo y se responsabiliza a la Municipalidad por su falta de mantenimiento.
Maldonado explicó a parlamentarios los trabajos de los expertos geofísicos con radares de penetración a 40 metros de profundidad en el suelo de los alrededores del hoyo, los cuales determinaron la inexistencia de futuros riesgos.
Los legisladores y la Procuraduría de Derechos Humanos pidieron al funcionario extender a toda la urbe las investigaciones para verificar la red de drenaje y tratar de determinar la posibilidad de apertura de otros agujeros.
Opiniones autorizadas han alertado sobre estos problemas al calificarlos de recurrentes y muy graves, pues desde la década de 1950 han ocurrido seis u ocho hundimientos de ese tipo.
Expertos descartan se deban solo a colapsos en los drenajes y recuerdan que la ciudad está construida sobre un terreno agujereado, donde hay fallas que afectan a todo el valle sobre la cual se ubica.

Sostenerse en el Amor Uno

Sostenerse en el Amor Uno

Sosténganse en el Amor Uno.
Es todo lo que necesitan.
Es la única verdad.

El Amor Uno es la esencia de lo que son, de lo que somos.

Sostenerse en el Amor Uno es permanecer en la conciencia de lo que ES.

Viven en un espacio de apariencias. Esas apariencias se mueven, se diluyen, se modifican cada vez más rápidamente.
El aferrarse a cualquier tipo de apariencia produce sensaciones de caos e inestabilidad.
El único punto de anclaje; el único punto de paz, es tener conciencia permanente de la verdad del ser.
La conciencia de ser Uno con la Totalidad. La conciencia de ser Amor Uno.
Cada uno es un punto conciente de la totalidad que es puro Amor.
Sosténganse en esta verdad aunque sus mentes les muestren apariencias diversas.
El juego de las apariencias se irá aquietando y entrarán finalmente en la belleza infinita de la verdad esencial que es el Amor Uno que nos sostiene, nos forma, nos une y nos acuna.
 
En el Amor Uno con ustedes siempre

martes, 29 de junio de 2010

La meditación puede cambiar el cerebro

La meditación puede cambiar el cerebro

La ciencia comprobó que quien la practica tiene más materia gris

Tesy de Biase

Desde que la meditación ingresó en el diccionario médico de la mano del Dalai Lama, la ciencia ha podido corroborar la eficacia terapéutica de esta práctica, de aspecto tan inocente que en la actualidad se aplica tanto para vencer el odio como para controlar un cuadro de ansiedad o de hipertensión arterial.
El hallazgo más reciente sobre el poder de la meditación proviene del Laboratorio de Neuroimágenes de la Universidad de California, Estados Unidos. Allí, la investigadora Eileen Luders demostró que meditar no sólo produce cambios en el funcionamiento cerebral de los meditadores, sino que también los genera en la estructura misma del cerebro.
"Los meditadores tienen más materia gris en las zonas del cerebro relacionadas con el control de las emociones", comentó a LA NACION la doctora Luders , que inaugura con sus palabras una plataforma común entre ciencia y meditación. Al hacerlo, facilita el salto hacia otro discurso. Por ejemplo, el que presentó en su visita a Buenos Aires el monje tibetano Khenpo Sangpo Bodh.
Con su típico atuendo, este doctor en filosofía llegó a Buenos Aires proveniente del Instituto de Altos Estudios Budistas Khamgar Druk College Dharmakara, ubicado en la comunidad tibetana de Tashi Jong, en el norte de la India, para difundir el poder transformador de la meditación.
Khenpo propone transmutar las emociones destructivas a través de la disciplina y el control de la mente. El resultado prometido: nada menos que la disolución de la violencia y ese efecto dominó que tan bien conocía Mahatma Gandhi, cuando conmovió al poderío colonial británico poniendo una y otra vez la otra mejilla.
¿De dónde proviene el poder para alcanzar semejante transformación? "De la meditación", sintetiza con certeza inconmovible.
"Es una herramienta de autoconocimiento y el antídoto contra todas las emociones destructivas". Y cuando dice todas, el optimista lama piensa en las 84.000 (sí, ochenta y cuatro mil) emociones negativas que según las escrituras budistas se desprenden de las básicas: ira, apego (posesivo), orgullo, envidia e ignorancia (opacidad). Con tantos miles de enemigos, el camino hacia la felicidad parece arduo. Y lo es. No se trata de querer y poder, sin más, admite el maestro: hay que transitar un largo entrenamiento que conduce a la transformación interior.
"Meditar permite liberarnos de las fuerzas negativas que nos hacen sufrir", sostiene. Y ofrece la receta de la transmutación emocional positiva para amateurs : "Hay que empezar por la a. El primer paso es reconocernos a nosotros mismos y observar el contenido de nuestra mente, preguntándonos a qué responden esas emociones negativas". Para ver con claridad Khenpo -como lo llaman sus seguidores- sugiere algo tan sencillo como sentarse y relajarse, lo que parece sencillo, pero no lo es tanto.
"Cuando la gente vive con intenso movimiento, tiene dificultades para encontrar calma, pero la mente es como el agua: si se mueve, no permite ver el reflejo de la luna y las estrellas en su superficie; en cambio, cuando está limpia y calma, en pocos minutos trasluce lo que hay en la profundidad y refleja todo. Cuando una persona está habituada al movimiento excesivo, ni siquiera sabe quién es. Yo les digo que se sienten en silencio y que miren en su mente."
El siguiente movimiento responde a uno de los ciclos de las enseñanzas de Buda: rechazar las emociones negativas como si fueran un alimento envenenado. Sin contemplaciones, la propuesta apela a un acto firme de disciplina y voluntad, que se traduce en tolerancia cero con ese odio o envidia que carcomen la paz interior. El maestro budista lo describe como una purificación de los componentes tóxicos de la mente.
Y el tercer momento es el de la transformación liberadora, una reconexión desde la calma, que tampoco se dirige hacia el exterior pero tiene efecto sobre él. La herramienta principal es la práctica de alguno de los distintos tipos de meditación que, básicamente, combinan relajación mental con ejercicios de respiración. La forma más reconocida es focalizar la mente en un objeto exterior, que pueden ser una luz o una imagen. Aunque el maestro recomienda seis prácticas diarias, reconoce que con una al levantarse, antes del desayuno, también se obtienen resultados pacificadores sobre la mente.
"Cuando cambia la mente cambia todo, no solo porque se ve al mundo de otra manera sino porque el cambio de uno provoca cambios en los demás. Para terminar con el odio y las emociones destructivas no podemos usar el odio y las emociones destructivas. No podemos matar a una persona como medio para lograr que esa persona deje de matar. Por la fuerza no se alcanzan los cambios. Buda nunca usó armas. Tampoco Cristo ni Mahatma Gandhi ni la madre Teresa de Calcuta. La paz y la transformación de las emociones negativas se alcanza por medios pacíficos, como la meditación, que es un instrumento de transformación interior".


"Quienes meditan tienen más materia gris"

Sentarse a pensar en nada frente a una vela encendida resulta tedioso, inútil y hasta ridículo para la mayoría de los occidentales. Sin embargo, hoy esta práctica de aspecto tan inocente es reconocida por la medicina convencional como una estrategia terapéutica alternativa para doblegar cuadros tan disímiles e indomables como el estrés y la ansiedad, la hipertensión, la migraña o las complicaciones cardiovasculares.
Unos años atrás, distintos investigadores del campo de la neurología, como el famoso Daniel Goleman, dieron un paso más con el consentimiento del Dalai Lama. Así, distintos monjes budistas entrenados en el arte de la meditación fueron estudiados bajo la lente de los resonadores nucleares de última generación. Las imágenes que evidenciaron diferencias en el funcionamiento cerebral de los meditadores dieron la vuelta al mundo y desde entonces las investigaciones se multiplicaron.
El último capítulo de este escrutinio científico sobre una práctica milenaria lo escribió un equipo del Laboratorio de Neuroimágenes de la Universidad de California, Estados Unidos. Con tecnología de última generación los científicos compararon los cerebros de 44 personas: 22 de ellas sin antecedentes de meditación y 22 con un entrenamiento en esta práctica milenaria que osciló entre los 5 y los 46 años, con un promedio de 24 años practicando alguna de las múltiples formas de meditación.
Esta vez, los científicos se centraron no ya en los efectos de la meditación sobre el funcionamiento cerebral, sino en su influencia sobre la estructura misma del cerebro. Eileen Luders, autora del estudio publicado en la revista Neuroimage , explica sus asombrosos hallazgos: "Los meditadores tienen más materia gris en aquellas zonas del cerebro relacionadas con el control de las emociones".
¿Cómo llegan los meditadores a generar más materia gris? "Al igual que cuando alguien entrena sus músculos, algunas áreas del cerebro deben crecer cuando las usas intensamente", arriesga la investigadora.
La materia gris es el tejido encargado de procesar la información que la materia blanca transmite. Una hipótesis sencilla -que probablemente la ciencia tarde años en confirmar-es que a mayor materia gris, mejor desempeño cerebral. Desde Los Angeles, Luders sostiene: "La mayoría de los meditadores tienen habilidades sobresalientes con respecto a la autorregulación de sus emociones; es para ellos más fácil mantener la estabilidad emocional y tener un comportamiento centrado, tal como elegir con sabiduría sus respuestas o reacciones. Además, los meditadores son reconocidos por su extremadamente positiva mirada sobre la vida; es habitual para ellos ver, en lugar de la parte vacía, la mitad llena del vaso".